El diario de Tita es
el espacio donde la protagonista atesora sus secretos más intrincados, recetas
sin preparar, recuerdos que casi se diluyen; es el sitio sagrado donde se
mezclan todos los ingredientes de una gran novela junto con los destellos espirituales
característicos de la autora. Esta historia logra regalarnos un secreto que a
su vez nos permitirá recuperar nuestra propia intimidad y, por qué no, nuestro
propio secreto guardado en el fondo de una flor marchita o de una carta que
después de generaciones espera sorprender a su asiduo lector.
Tras veinticinco años de la aparición de Como
agua para chocolate, que ha robado el corazón de más de siete millones de
lectores, El diario de Tita es la realización del sueño de
Tita: compartir con todo el mundo los más íntimos rincones de su corazón. Este
conmovedor relato nos permitirá conocer de cerca los hilos mágicos e íntimos
con que en su momento fue tejida Como agua para chocolate. La
cautivadora historia que le ha dado la vuelta al mundo.
La historia de amor entre Tita y Pedro es
ya de sobra conocida. ¿Quién no recuerda ese amor imposible? Esquivel fue capaz
detraducir en los fogones la
pasión reprimida por la dura moral de una familia.
Si queréis revivirlo —o conocerlo por
primera vez— ahora tenéis una oportunidad para no dejar pasar, pues Suma de Letras ha
editado hace poco un volumen
titulado El diario de Tita, en
el que la protagonista cuenta en primera
persona todo lo acontecido en Como agua para chocolate. Como
seguidora de la escritura
diarística femenina, no he podido evitar hacerme con él y
devorarlo rápido para saciar aún más mi curiosidad.
Cualquier aportación a la literatura
femenina es interesante y necesaria, pero en el caso de esta obra tenemos la
suerte de que además de bucear en un yo narrativo femenino y su autoficción,
podemos conocer la
historia desde otro punto de vista y lograr empatizar
desde una perspectiva más cercana; bucear en los miedos de Tita, en sus
secretos, sus inseguridades, sufrimientos, deseos… En su intimidad.
Todo el libro te deja muy buen sabor de
boca y si a eso le sumamos que tenemos en nuestras manos una edición preciosa, muy original
y cuidada, ¿qué más podemos pedir? Se nota el esfuerzo y las
ganas de Penguin Random House; el exterior en piel imita un diario y las páginas
parecen escritas a mano. Además, a esto hay que añadirle
multitud de detalles,
como fotografías, recetas, flores… Las hojas simulan estar quemadas e incluso
hay algunas páginas cuyo texto está lleno de garabatos. ¡No falta nada!
Por último, hay que añadir, por si todavía alguien lo piensa, que El diario de Tita no
es la continuación de Como
agua para chocolate, sino un punto de vista nuevo, complementario, de la
historia. Eso sí, la autora ha confirmado que el próximo año se publicará Mi negro pasado, en
el que se contará la historia de la tataranieta de la hija que Pedro y Rosaura
tuvieron. ¡Hasta entonces!