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domingo, 27 de enero de 2019

LECTURA FÁCIL de Cristina Morales



Son cuatro: Nati, Patri, Marga y Àngels. Son parientas, tienen diversos grados de lo que la Administración y la medicina consideran «discapacidad intelectual» y comparten un piso tutelado. Han pasado buena parte de sus vidas en RUDIS y CRUDIS (residencias urbanas y rurales para personas con discapacidad intelectual). Pero ante todo son mujeres con una extraordinaria capacidad para enfrentarse a las condiciones de dominación que les ha tocado sufrir. La suya es la Barcelona opresiva y bastarda: la ciudad de las okupas, la Plataforma de Afectados por la Hipoteca, los ateneos anarquistas y el arte políticamente correcto.
Esta es una novela radical en sus ideas, en su forma y en su lenguaje. Una novela-grito, una novela politizadora que cruza voces y textos: un fanzine que pone en jaque el sistema neoliberal, las actas de una asamblea libertaria, las declaraciones ante un juzgado que pretende esterilizar forzosamente a una de las protagonistas, la novela autobiográfica que escribe una de ellas con la técnica de la Lectura Fácil…
Este libro es un campo de batalla: contra el heteropatriarcado monógamo y blanco, contra la retórica institucional y capitalista, contra el activismo que usa los ropajes de «lo alternativo» para apuntalar el statu quo. Pero es también una novela que celebra el cuerpo y la sexualidad, el deseo de y entre las mujeres, la dignidad de quien es señalada con el estigma de la discapacidad y la capacidad transgresora y revolucionaria del lenguaje. Es sobre todo un retrato –visceral, vibrante, combativo y feminista– de la sociedad contemporánea con la ciudad de Barcelona como escenario.
Lectura fácil confirma a Cristina Morales como una de las voces más potentes, creativas, inconformistas e innovadoras de la literatura española actual. De ella ha dicho la crítica:
«Una escritora exquisita y arriesgada que posee una mirada única y punzante que la diferencia del resto de propuestas literarias del momento» (María Jesús Espinosa de los Monteros, Mercurio).
«Una fuerza de la naturaleza… La escritura de Morales es poderosa y se coloca en las antípodas de la corrección política» (Marta Sanz, ABC).
«Una de las voces más originales e impactantes de la literatura actual» (Xavi Ayén, La Vanguardia).


sábado, 19 de enero de 2019

YO PUDE SALVAR A LORCA de Víctor Amela


Yo pude salvar a Lorca de Víctor Amela reconstruye la vida de Manuel Bonilla, el abuelo de Víctor Amela, labrador y pastor de la Alpujarra convertido en pasador clandestino de personas de un lado al otro del frente de guerra de Granada. La revuelta militar lo arrastró al fondo de uno de los sucesos más trágicos y universales de la guerra de nuestro país: el asesinato del poeta Federico García Lorca, as lo detalla contado desde sus protagonistas, es realmente un viaje al pasado de la mano de una hermosa historia personal.
Federico García Lorca es uno de los poetas y dramaturgos españoles más importantes del siglo XX. Nació el 5 de junio de 1898 en Fuente Vaqueros, un pequeño pueblo a pocos kilómetros de Granada. Su padre, Federico García Rodríguez, era terrateniente, y su madre, Vicenta Lorca Romero, era maestra.
Lorca publicó su primer libro, Impresiones y Viajes, en 1919. Ese mismo año, viajó a Madrid, donde permaneció durante la próxima década. Su primera obra de teatro, El maleficio de la mariposa, se produjo allí en 1920. Al año siguiente, publicó el Libro de poemas, una recopilación de poemas basados ​​en el folklore español.
En 1922, Lorca y el compositor Manuel de Falla organizaron el primer festival de cante jondo, o “canción profunda”, en Granada; La forma de la canción profunda impregnó sus poemas de principios de los años veinte. Durante este período, Lorca también se convirtió en parte de un grupo de artistas conocidos como Generación del 27, que incluía a Salvador Dalí y Luis Buñuel, quienes expusieron al joven poeta al surrealismo. En 1928, su colección de poesía Romancero Gitano le dio a Lorca una gran fama; Fue reimpreso siete veces durante su vida.
Un horror que le pesará para siempre en una vida que se injerta con la de otros personajes, célebres algunos -Luis Rosales, Ramón Ruiz Alonso, Gerald Brenan, Agustín Penón, Emilia Llanos- y anónimos otros, como Josep Amela, soldado republicano catalán que será prisionero suyo: el tiempo y el azar los convertirán en miembros de una misma familia.
Victor Amela barcelonés de 1960, es novelista y periodista. Decano de la crítica televisiva en la prensa, la ejerce desde hace treinta años en La Vanguardia, donde es co-creador de la sección «La contra» (1998), en la que ha publicado 2.100 entrevistas, espoleado por una curiosidad que no lo sacia . Colabora en programas de televisión y radio, y es también autor de las novelas El cátaro imperfecto (2013) y Amor contra Roma (2014). Portador de genes forcallanos, sostiene que un día mereceremos no tener presidentes ni gobiernos ni leyes, cree en la imaginación creadora y cita Llull: «Ya que existimos, alegrémonos!»


sábado, 12 de enero de 2019

LA HIJA OSCURA de Elena Ferrante


No se sabe a ciencia cierta quién es Elena Ferrante. Bajo ese seudónimo se halla oculta la persona que firma una novela corta donde no se teme exponer las inquietudes, confusiones y hasta el hastío que supone ser madre: La hija oscura.
Esta obra se firma en pleno apogeo de una sociedad donde cada vez se agrava más el bombardeo constante de artículos sobre peliagudas y polémicas cuestiones como el hecho de “no decir nunca que no” al niño, amamantarlo hasta los 8 años para trabajar el afecto, amasar las propias galletas sin conservantes ni colorantes, dormir hasta los 11 en su misma cama para establecer un vínculo… Se alaba a la madre que se vuelca en sus hijos abandonando el trabajo y su carrera, pero se comprende al padre que se dedica a traer el pan a casa. Elena Ferrante, sea quien sea, si es que eso ciertamente importa para acercarse a su obra, explora la figura de la madre más radicalmente humana, aquella que duda, que ve a sus hijas y no las reconoce, que llega incluso a abandonarlas por el espacio de 3 años para buscarse a sí misma. Lo que es, en fin, un ser humano. Porque quizá una madre no pueda todavía quejarse a viva voz de lo cansada que está, de las renuncias que ha tenido que hacer, de los disgustos que le dan sus retoños… y sueña cada noche con huir. Pero sueña en voz baja, sin que nadie la oiga. Puede que también existan madres así, aunque no se vean
Una brillante retrato de las ataduras de la maternidad. Una joya de la literatura contemporánea de la gran Elena Ferrante .A menudo, un gran viaje hacia nuestra parte más oscura empieza con un gesto sin sentido.Leda es una profesora de literatura inglesa, divorciada hace mucho tiempo, dedicada a sus hijas y al trabajo. Cuando ellas se trasladan a vivir con el padre, en vez de vivir la nostalgia y la soledad que esperaba, Leda de repente se siente liberada y decide tomarse unas vacaciones en un pequeño pueblo de la costa. Pero los días de calma aparente se acaban cuando vemos a esta mujer de mediana edad y mucho criterio huyendo de la playa con una muñeca en brazos.Página a página, un agradable descanso a la orilla del mar se convierte en el retrato de una mujer terca y sola, asaltada por unas preguntas que la llevan a arriesgarlo todo. En La hija oscura, la novela más querida por Elena Ferrante, la locura anda de la mano de la lucidez absoluta: nada sobra cuando un gesto sin sentido nos acerca a la gran literatura


domingo, 6 de enero de 2019

TÚ NO ERES COMO OTRAS MADRES de Angelika Schrobsdorff


La autora de este libro no pudo titularlo mejor: Tú no eres como otras madres. Y uno añadiría: y tú, lector, lectora, no has leído nunca un libro como este. Yo, al menos, no lo había hecho. Es un libro fascinante, abrumador, único. Casi no parece ni un libro (a tanto desprestigio puede llegar la literatura cuando se mide con la vida).
Veamos: trata de unas gentes que se creyeron alemanas antes que judías, lo que les resultó aún más doloroso cuando comprobaron que las iban a tratar sólo como judíos, desposeyéndolos de su dignidad para poder destruirlos. La Shoah. Su autora, Angelika Schrobsdorff, estuvo casada con Claude Lanzmann, autor precisamente de Shoah, la mítica película del Holocausto. Y lo que se cuenta aquí forma parte de ese relato universal e ­inabarcable que parece ir completándose con tanto dolor desde hace 80 años, cada día más extenso y cada día más vivo: como un universo en permanente expansión.
Sucede aquí lo mismo que con otras grandes obras: aunque pueda leerse como una novela (difícil encontrar un momento propicio para interrumpir su lectura), sabemos que se trata de las memorias de una persona, y por tanto, un relato veraz de un tiempo (el de antes, durante y después del III Reich) y unas ciudades (Berlín primero, Sofía después) dominados por millones de fanáticos (“el pueblo alemán” tal y como lo presentaron los jerarcas del partido nazi, y los Gobiernos europeos controlados por las SS) que terminaron reduciendo a millones de personas, entre ellas los principales personajes de estas páginas, a su condición racial, con el único propósito de acabar con ellas.
No hay una vida igual a otra, ni ninguna resulta insignificante cuando se la mide con ese implacable metro iridiado que es el sufrimiento. Y basta que alguien cuente sin retórica su vida para que se produzca algo tanto o más fascinante que el principio que rige la ficción, o sea, algo tan seductor como el argumento y el sentido narrativo con el que se presentan las novelas: la verdad. Ese es el punto de la indecidibilidad: nadie podría decidir si eso que lee es una novela o un relato verídico, como advertimos en la famosa “novela” del cautivo que aparece en el Quijote: ¿es una ficción o la confesión autobiográfica de Miguel de Cervantes?